El Estado sionista de Israel lanzó el pasado lunes una nueva ofensiva al pueblo palestino, esta vez sobre la zona de Khan Younis, al sur de la Franja, en la que murieron 73 personas, incluyendo 24 menores de edad. Con esto, la cifra de asesinados aumenta a 39 mil cien personas y unos 90 mil 147 heridos. Desaparecidas más de 10 mil personas, fuera de la cifra mencionada anteriormente.
Medios de comunicación como Almayadeen, informaron que al menos 163 periodistas palestinos fueron asesinados en el transcurso de esta agresión calificada como genocida por la Corte Penal Internacional (CPI).
En otra línea, el Gobierno chino organizó una mesa de diálogo entre facciones palestinas Fatah y Hamás, para intentar resolver las discordias internas, que para las autoridades de China son un factor vital para afrontar el conflicto histórico que Palestina vive contra Israel.
El Movimiento Nacional de Liberación Palestina (Fatah) fue fundado en 1959 por el líder palestino fallecido Yasser Arafat y la Organización para la Liberación de Palestina (OLP) emprendieron esfuerzos políticos, diplomáticos e incluso armados, en pro de la creación del Estado Palestino, una lucha histórica en defensa de los derechos de su pueblo. Fatah, ha gobernado desde 1990 dentro de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), tiene la administración de parte de Cisjordania y desde 2007 mantiene un conflicto con Hamas que gobierna en la Franja de Gaza.
Hamas, es reconocida como movimiento de resistencia islámica, surgió en 1987 mientras se desarrolló la primera Intifada. Este grupo organizó la defensa-ataque contra Israel y a raíz de esta, el sionismo declaró la guerra abierta el pasado octubre de 2023.
Ambas facciones aceptaron reunirse en Pekín para tratar sobre sus diferencias y también para tratar el tema de la guerra, las delegaciones estuvieron encabezadas por Ismail Haniyeh por Hamas y Mahmud Alul por Fatah. Para sellar la reunión se firmó un acuerdo para cogobernar en el futuro, es todo un logro tras años de enfrentamiento, un paso sólido para la reconciliación nacional.
La intervención de China en el diálogo es una señal positiva de esta potencia mundial en el intento por la paz en el conflicto de Oriente Medio y en que cese la hostilidad y la violencia en contra de un pueblo que lucha por sobrevivir.
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Correo del Alba
