Se trata del Decreto Supremo N° 4539, promulgado el 7 de julio de 2021, que permitirá el uso eficiente de la energía eléctrica, para mejoras del medio ambiente, por lo cual se incentiva a la industria automotriz a “fabricar, ensamblar e importar vehículos eléctricos e híbridos, incluyendo la maquinaria pesada”, adecuando también la normativa de pago arancelario entre 0 y 35%, en algunos ítems, beneficiando específicamente a la producción agrícola a los que se les exenta el impuesto al valor agregado.
El ministerio de Economía y Finanzas, ha anunciado que en ánimos de promocionar el uso de la energía eléctrica vehicular y para la maquinaria industrial, se generarán “incentivos tributarios para equipos y/o accesorios de sistemas de energía y generación distribuida, modificando las alícuotas del Gravamen Arancelario para la importación de sistemas de recarga (cargadores para vehículos eléctricos), medidores bidireccionales e inteligentes, inversores y mercancías”.
La medida está en el marco del impulso y reactivación económica que viene ejecutando como parte de su plan de gobierno el presidente boliviano, Luis Arce. Bolivia con este plan pasa a ser parte de los países que se acercan a la transformación industrial con energía limpia o energía eficiente, ya que una de las principales apuestas es crear instalaciones de llenado eléctricos para vehículos de pequeña, mediana y alta capacidad.
Alineada a esta iniciativa la Empresa Nacional de Electricidad (ENDE), construirá once distribuidores de energía en las ciudades de Cochabamba, La Paz y Santa Cruz, en un plazo de 90 días aproximadamente, como se detalla en la web del ministerio de Economía y Finanzas de Bolivia.