De la paz, se podrían decir muchas cosas, una de estas, sería su necesaria y permanente simbiosis con la justicia. En Venezuela hay varias personalidades que han trabajado por la paz y la justicia, pero, sin duda, uno de los más resaltantes es el padre Juan Vives Suriá, quien dentro de sus frases más emblemáticas siempre destaca: «si quieres la paz, trabaja por la justicia y equidad, la paz no se da, se construye».
Hablar solamente de paz en la actualidad, mientras observamos guerras y persecuciones a grupos de personas por su identidad, creencias o apariencia en distintas partes del mundo, resulta una visión limitada. El concepto de paz trasciende la simple ausencia de guerra formal; implica abordar las raíces del conflicto. Necesariamente debemos analizar el odio como motor de guerras, persecuciones, xenofobia y aporofobia, entre otros factores.
Sin duda alguna, el odio es un elemento perjudicial para la paz, la estabilidad y la cohesión social. Es necesario enfocarnos más allá del odio, esto significa superar, trascender, pero también desmenuzar el odio, esto para poder identificarlo y combatirlo. En lugar de enfocarse en el resentimiento, la ira y la hostilidad, se trata de encontrar una perspectiva que permita avanzar hacia la comprensión, la reconciliación y la paz.
Superar el odio implica tomar decisiones conscientes para dejar atrás la venganza y el deseo de daño, y buscar caminos para la reconciliación y el perdón. Es necesario contribuir a generar las condiciones necesarias para promover y garantizar el reconocimiento de la diversidad, la tolerancia y el respeto recíproco, así como para prevenir y erradicar toda forma de odio, desprecio, hostigamiento, discriminación y violencia, a los fines de asegurar la efectiva vigencia de los derechos humanos, favorecer el desarrollo individual y colectivo de las personas y preservar la paz.
En Venezuela, en varias ocasiones lamentablemente, han existido episodios de odio contra algunos segmentos de la población donde el inicio de este clima de hostilidad fue marcado por expresiones discriminatorias o de deshumanización al supuesto adversario mediante distintas herramientas de comunicación. Las campañas comunicacionales y discursos de odio han tenido consecuencias materiales y humanas en distintas etapas de nuestro país.
Es necesario respetar los principios acordados y las leyes para la convivencia, asumir lo contrario es apostar por la guerra y no creer en los seres humanos y su diferencia de racionalidad con las bestias. En el caso venezolano, con la aprobación de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela de 1999, se asumió el modelo de Estado democrático y social de Derecho y de Justicia, que propugna como valores superiores de su ordenamiento jurídico y de su actuación: la vida, la libertad, la justicia, la igualdad, la solidaridad, la democracia, la responsabilidad social y, en general, la preeminencia de los Derecho Humanos, entre ellos, el derecho a la paz.
Entender el odio, su construcción social y las consecuencias jurídicas no es sencillo. Debido a esa complejidad, y con el objetivo supremo de construcción de la paz y la convivencia, se creó una obra pionera del ámbito jurídico con un análisis profundo y sistemático de los delitos contra el odio en el país, titulada Más allá del odio. Manual de delitos contra el odio en Venezuela, que pudiera ser una guía obligatoria para los profesionales del derecho penal, investigadores académicos y estudiantes, pero también para comunicadores sociales y la población en general.
Esta obra presentada en la Feria Internacional del Libro de Venezuela (FILVEN) 2025, representa un aporte importante para fomentar un debate jurídico y social en Venezuela sobre la protección efectiva de los derechos fundamentales, en el marco de la paz y la convivencia pacífica. En este mismo sentido la diplomacia de paz venezolana mediante distintas actividades nacionales, regionales e internacionales también ha generado espacios de discusión sobre la paz y los elementos que pudieran erosionar la convivencia pacífica. Es por ello por lo que se llevó a cabo, en septiembre 2024, el Congreso Internacional contra el Fascismo en Venezuela y se realizará la conferencia internacional «Por la Paz y Contra la Guerra» el 23 y 24 de julio.
Esta conferencia “Por la Paz y Contra la Guerra», celebrada en Caracas, se centrará en la necesidad de construir un mundo pacífico y sostenible; especialmente en un momento de desafíos como la división y la propagación del odio. Además, se discutirá cómo las actividades de consolidación de la paz pueden ayudar a las naciones a pasar de la guerra a la paz y prevenir futuros conflictos, promoviendo así un desarrollo duradero.
El líder y abogado penalista de Colombia, Jorge Eliécer Gaitán, señaló con relación a la paz: “Nada más cruel e inhumano que una guerra. Nada más deseable que la paz. Pero la paz tiene sus causas, es un efecto. El efecto del respeto a los mutuos derechos”. Para conservar la paz debemos entender que la guerra tiene su cimiento en el odio e irrespeto de los derechos de los semejantes y contra eso es que debemos luchar.
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Yonder Canchica Venezolano, abogado experto en Derecho Internacional
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