Por Correo del Alba
Esta mañana el gobierno de facto envió una carta convocando al diálogo a los siguientes sectores del país: Tribunal Supremo Electoral (TSE), a la Central Obrera Boliviana (COB), a los candidatos a la presidencia y vicepresidencia de todos los partidos que participarán en las elecciones, y a los presidentes de la cámara de senadores y diputados, con el objetivo de confirmar la fecha electoral y deponer los bloqueos que, según argumentan, impiden el paso de oxígeno para atender a los enfermos del Covid-19, por lo que denominó la convocatoria como un «Diálogo por la vida».
La carta dada a conocer en medios de comunicaciones generó muchas especulaciones, sobre todo si asistiría o no el Movimiento Al Socialismo (MAS) al encuentro, pero, finalmente, la respuesta de Luis Arce en conferencia de prensa fue afirmativa, pero bajo tres condiciones:
1. Para que tenga legalidad la fecha de nuevas elecciones debe establecerse en una ley.
2. Se exige al TSE que garantice una fecha fija e inamovible y definitiva.
3. Se exige que ese acuerdo sujeto al diálogo cuente con el aval y el auspicio de organizaciones y la comunidad internacional.
Asimismo, el binomio Arce-Choquehuanca dio a conocer que deplora cualquier enfrentamiento entre bolivianos y denunció que los medios de comunicación, de manera malintencionada, han acusado al MAS por la falta de oxígeno en los centros hospitalarios, cuando este problema se arrastra antes de los bloqueo. Además, se refirió Luis Arce a la escasez por la disminución de la producción que afecta a los sectores más empobrecidos y, por último, habló de la medida de término del año escolar, que repercute especialmente en el área rural.
“No hay suficientes medicinas, los precios han subido, disminuidos los ingresos, hay muchos perdiendo trabajos, y eso ha generado un clima absolutamente negativo en el país, por eso comprendemos por qué el pueblo organizado movilizó y determinó las medidas de presión, es claro el objetivo es entender lo qué está pasando en el país, sin embargo cuando nos enfrentamos a un proceso electoral con fecha 6 de septiembre, cuando la fecha es dilatoria y se aleja más (…) por lo tanto queremos acompañar una fecha que sea determinada a través del mecanismo del diálogo”, afirmó.
El MAS deberá bajar a las bases y analizar con ellas la resolución del conflicto, porque la iniciativa de bloqueo y movilización comenzó en el movimiento social, protagonista de la coyuntura política, forzando al gobierno de facto a llamar a este diálogo improvisado.
Se había resuelto al interior de las bases del movimiento social que la consigna ya no era por la fecha de elecciones sino «fuera Áñez», ¿logrará el diálogo resolver el gran malestar que el pueblo siente en estos momentos por la falta de atención y represión que han sufrido en todo estos meses?