Al interrogar sobre el por qué y para qué continuar la formación educativa, la respuesta a esto siempre estará relacionada con la motivación o desmotivación de cada persona. La motivación está muy relacionada a lo que le produce a cada individuo el estudiar o aprender; y cuando nos referimos al estudiar nos estamos refiriendo a capacitarnos, lo cual no incluye solo la educación formal, sino que comprende el aprender un oficio o actividad con dedicación y disciplina.
Anteponer a otras cosas el compromiso y necesidad de estudiar o de aprender, dependerá de lo que nos genera el conocimiento. Al respecto de esto, señaló el pedagogo brasileño Paulo Freire: “Enseñar no es transferir conocimiento, sino crear las posibilidades para su propia producción o construcción”. A su vez las necesidades humanas y motivaciones se vinculan con lo que se conoce como la Pirámide de Maslow, que es una teoría jerárquica de las necesidades humanas.
La mencionada pirámide está formada por cinco niveles diferentes, conocidos como necesidades humanas que toda persona debe cumplir para conseguir su punto álgido de motivación y concentración. En la base de la pirámide de Maslow, la mayor parte, está formada por las necesidades fisiológicas de toda persona; una vez cubiertas estas necesidades, pasamos al siguiente escalón. La pregunta sería: ¿qué necesidad personal o que satisfacción le brindan los estudios a cada individuo para decidir continuarlos o no?
Los seres humanos estudian y adquieren conocimiento por distintas razones, como lo pueden ser: ganar estatus social, mayor remuneración por sus actividades, tener más herramientas para ayudar a otros, percibirse exitoso, o para entender en el mundo que los rodea. Por las razones que sean o por todas la anteriores es indiscutible que quien se prepara siempre tendrá mayores oportunidades frente a quien no lo hace. Se puede tener mucha voluntad y ganas de triunfar, pero es indispensable tener un proceso de enseñanza-aprendizaje que tenga elementos como: planificación, metodología, medios de enseñanza, evaluación, objetivos claros y tener a un entrenador, mentor o maestro.
Existen personas que indistintamente de su origen social con un buen proceso de aprendizaje y disciplina en el área deportista actual son exitosas, como lo son: Miguel Cabrera, Yulimar Rojas y Yeferson Soteldo. En el área académica de las ciencias y artes se puede mencionar a Aquiles Nazoa, Rómulo Gallegos, Vicente Convit, Humberto Fernández Morán, Agustín Aveledo, el maestro José Antonio Abreu, Gustavo Dudamel, entre otros. Existen muchos referentes positivos en distintas áreas que inspiran a mejorar y aprender, solo es necesario entender que si el estudio y la preparación son costosos es porque requieren de esfuerzo y constancia; y entender que resulta mucho más caros y pesados el no prepararse y la ignorancia.
Por desgracia, actualmente se da mayor protagonismo y relevancia a otros ejemplos superficiales, temporales y de masificación digital. Si algo tiene el estudio y el aprendizaje es su permanencia en el tiempo y que es una herramienta importante en el desarrollo integral del ser humano, esto es superior a las modas y las ofertas engañosas del extranjero. El conocimiento es algo especial, tanto quien lo trasmite como quien lo recibe se enriquecen de él en la medida que aportan nuevo significado a la experiencia y a la forma de ver el mundo y de estar en él. El mundo de cada individuo está limitado a lo que sabe y lo que no sabe.
La “Educación Liberadora”, debe dar origen al pensamiento crítico y no a repetidores de cualquier escrito o texto. Se debe tener la capacidad de analizar y evaluar la consistencia de los razonamientos. El inmediatismo impuesto por la sociedad actual no es una referencia real de sustento para el desarrollo. Los beneficios que tiene estudiar son infinitos y podemos enumerar algunos como: uno. Incrementa tu autoestima, dos. Aprender evita quedarse estancado, tres. Contribuye con la adaptación, cuatro. Impulsa mayores oportunidades de desarrollo, cinco. Brinda estrategias para alcanzar objetivos y metas, seis. Nos auxilia con los rápidos cambios de los tiempos modernos, siete. Favorece el sentimiento de realización, ocho. Brinda mayores oportunidades laborales, nueve. Contribuye con el desarrollo integral de la persona, y 10. Beneficia el desarrollo del país.
A fin de ampliar la visión del tema, es importante entender por qué se estudia o por qué algunos perecen en el camino. Todo conocimiento es útil y ninguno esta demás ni sobra. Valorar el hecho de aprender y hacerlo con dedicación es importante, por eso es importante que estudiemos y nos prepararnos en lo que nos gusta. Estudiar no solo nos permite adquirir nuevos conocimientos y habilidades, sino que también ayuda a explotar nuevos potenciales y ampliar horizontes, tanto personales como profesionales. Pero lo más importante es que podamos tener una mejora personal, y con más posibilidades en todos los aspectos, con esos conocimientos.
En la Venezuela de hoy estudiar es una posibilidad real y es una valiosa decisión para el futuro duradero. Parafraseando al Libertador, Simón Bolívar, podríamos decir que un pueblo sabio es un instrumento consciente de su propia construcción. En palabras de uno de los mayores exponentes en la defensa de los Derechos Humanos y expresidente de Sudáfrica, Nelson Mandela: “La educación es el arma más poderosa que puedes usar para cambiar el mundo”. En definitiva, no podemos optar entre vencer la ignorancia o caer derrotado frente a esta, necesario es vencer.
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Yonder Canchica Venezolano, abogado experto en Derecho Internacional
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