Por Alejo Brignole
Un debate persistente en el ámbito del arte, es si este debe conformar solo las pulsiones expresivas en un sentido morfológico (y por tanto circunscrito a la estética), o bien debe atender las demandas de su tiempo en cuestiones más amplias. Es decir, debe ser un arte “comprometido” que dé testimonio, que implique una reflexión y abra compuertas críticas a las problemáticas de cada momento histórico y político. Un debate que no está clausurado, a pesar de los miles de páginas, libros, y ensayos que ha producido desde la Grecia clásica hasta la actualidad.
En el caso de la chilena Antonella Sepúlveda Cubillos, esta dicotomía parece haberse resuelto. Militante comunista y creadora del Proyecto «Tallado y Memoria», nació en Santiago de Chile hace 38 años y no hace mucho comenzó a dar forma a una disciplina dentro de la plástica. Su trabajo se centra en la iconografía revolucionaria de nuestra América y también de otras regiones, siempre utilizando la técnica del bajorrelieve y la pintura en negativo. Dada su singularidad, Correo del Alba decidió entrevistarla para conocer de cerca a esta original artista.
Dentro de las expresiones plásticas, usted escogió una técnica muy particular para representar íconos sociales y revolucionarios… ¿cómo surgió esta forma de expresar imágenes con contenido político?
Me considero una diseñadora bastante inquieta y perfeccionista. Quizás por ello me preocupa poder hacer un aporte significativo en mi área, algo que deje huella. Gracias a los cuatro años estudiando diseño en Santiago, adquirí el interés por estudiar el comportamiento y la textura de los materiales. Primero quise hacer algo con los envases plásticos, pero no logré crear algo que realmente me dejara conforme, aunque seguí pensando en ese tema. Cierto día, mientras vivía en Valparaíso, observando el mar y apreciando un busto de Salvador Allende rescatado en una feria libre y que me acompaña junto a la ventana, comencé a analizar sus lentes negras tan características y simbólicas, con sus marcos de buen espesor junto con esa mirada de hombre noble. Allende es un ícono inconfundible a nivel universal. Con una historia detrás, llena de sueños, esperanzas y alegrías que en lo personal y como chilena me llena de orgullo.
Recordé que tenía gubias para tallar madera y pensé… ¿Y si dibujo los lentes en una madera y los pinto color negro? ¿Y si empiezo a calar la parte incolora para dar volumen? Preguntas que me hice a medida que iba avanzando. Finalmente pinté las lentes y logré darle un volumen. Todo trabajado en una placa de madera en 30×30 cm. Ese mismo día subí el diseño a mi cuenta de twitter: @upelienta_sss para saber opiniones y fue tan bien recibido, que desde ese día (hace ya más de un año) no he parado de trabajar y recibir encargos.
Su técnica es muy depurada, ¿la fue experimentando de forma autodidacta o fue mejorada bajo alguna tutela artística?
Todo partió de manera autodidacta y las terminaciones las he ido mejorando gracias a la perseverancia y la paciencia, un ingrediente clave en toda obra artística para un resultado satisfactorio. No me importa el tiempo que me toma realizar un diseño, trabajo para el resultado final.
¿Cuánto tiempo promedio le lleva concretar una de sus obras?
El tiempo depende del diseño y su complejidad. Puedo demorar desde 5 a 6 horas, hasta casi 30 horas, que fue lo que demoré el último diseño de 100×80 cm., una de mis obras más grandes y complejas, para mi grupo musical más amado: Inti Illimani.
«Este tipo de arte que me ocupa, sin dudas nace de la necesidad de educar desde la cultura y contribuir a crear conciencia»
Ha hecho retratos de grandes luchadores por otro mundo posible… Rosa Luxemburgo, Marx, Fidel, el Che, y por supuesto, Salvador Allende… ¿Qué la impulsa a circunscribirse a ese universo de hombres y mujeres tan definidos en su mirada sobre el mundo?
Mi historia familiar ,y de la cual me siento orgullosa, viene del mundo de la izquierda. Mi abuelo fue dirigente sindical del ámbito ferroviario, conductor de ferrocarriles del Estado y militante comunista. Mi padre, trabajador público durante el Gobierno de Salvador Allende, hoy es un exonerado político. Todo ello sumado a la formación política que adquirí con los años y que creció conforme fue pasando el tiempo. Cada situación de injusticia que uno observa requiere de la acción de nuestros líderes y la nuestra individual si deseamos superar este tipo de sociedad depredadora llamada capitalismo. Sobre todo hoy, donde el fascismo parece resurgir con fuerza. Este tipo de arte que me ocupa, sin dudas nace de la necesidad de educar desde la cultura y contribuir a crear conciencia.
Sobre muchos de estos personajes históricos existe una gran galería de fotografías e imágenes. Pensemos en el Che o el Allende, ambos muy retratados… ¿Qué debe tener una imagen para que usted la escoja y la traslade a sus bajorrelieves en madera?
En general, no tengo restricciones. Durante la infancia mi padre me hablaba sobre el Gobierno de Salvador Allende y las injusticias del golpe militar de Pinochet que él mismo vivió. Todo lo que he hecho parte con Allende, el gran inspirador de este proyecto que tanto amo. Me piden desde retratos personales, hasta la réplica de una pintura relacionada con la lucha del proletariado. Otras veces me piden que haga un retrato familiar de personas desconocidas, pero que para ese núcleo familiar es importante. Algo que agradezco pues consideran mi trabajo y de alguna manera se cumple el objetivo de mi arte, que es rescatar y mantener viva la memoria, ya sea en lo personal o en lo colectivo. Por ningún motivo acepto realizar personajes contrarios a mis principios políticos.
Sus cuadros sobre tabla son de un formato medio… ¿Ha pensado alguna vez realizar alguna imagen en gran envergadura? ¿El soporte en el que trabaja admite grandes formatos?
Los tamaños parten desde los 30×30 cm. o 20×30 cm., formato que yo misma establecí, aunque no me impuse límites con la dimensión. No hace mucho finalicé el formato más grande que me han encargado hasta el momento, 100×80 cm.
La cantera de personajes que han luchado y dejado la vida por ideales revolucionarios es cuantiosa… ¿Piensa ampliar la mirada hacia otros líderes mundiales? Estoy pensado en el congoleño Lumumba, en el argelino Ahmed Ben Bella, en Ghadaffi, en el chino Mao, o el vietnamita Ho Chi Ming y tantos otros…
Por supuesto, llevo apenas un año en este proyecto y no he parado con la demanda. Algo que considero muy auspicioso, pero que de momento me imposibilita pensar nuevos diseños. Son tantos que primero le doy prioridad a lo que me pide la gente. Espero poder crear una exposición y llegar a tener mi galería donde las personas puedan visitar y ver mis obras de manera presencial.
Su temática, además de poseer un alto contenido estético, resulta sin dudas inspiradora, sobre todo en estos tiempos de contraofensiva neoliberal… ¿Algún personaje público ha adquirido sus trabajos?
Este camino ha sido muy gratificante… Tengo el reconocimiento de la gente en general y también de muchos personajes públicos y reconocidos que cuentan con mis obras en sus ámbitos de trabajo, ya sea en su oficina o en algún lugar favorito de la biblioteca de su propio hogar. Eso me llena de motivación para seguir trabajando por embellecer los espacios dejando un mensaje con contenido. Entre ellos el sociólogo y ensayista argentino Atilio Boron; Jorge Arreaza, el canciller venezolano; Pablo Sepúlveda Allende, nieto de Salvador Allende y militante antiimperialista; Daniel Jadue, Alcalde de Recoleta por el Partido Comunista de Chile; o Jorge Baradit, escritor chileno, entre una larga lista.
Por último… ¿Dónde te pueden contactar los interesados en tu trabajo? ¿Haces envíos fuera de tu país?
Verá… Cuento con 3 plataformas: Facebook, Instagram, y Twitter, y las tres poseen la misma ruta de búsqueda: @Talladoymemoria. Y, en efecto, realizo envíos a todo Chile y el mundo.
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Alejo Brignole Analista internacional y escritor
