El 13 de junio se inscribieron ocho binomios presidenciales y la única mujer candidata a presidenta de la República del Ecuador pertenece a la organización política de la Revolución Ciudadana, Luisa González. Por primera vez en la arena electoral atípica ecuatoriana, que será por un período menor a dos años, hasta culminar el mandato que la falta por cumplir al presidente neoliberal Guillermo Lasso, que implementó la muerte cruzada.
Los otros siete binomios tienen un matiz de transfuguismo político, atados por un cordón umbilical anticorreísta, que evidencian la carencia de organización, estructura territorial y de cuadros, ya que pertenecen a movimientos políticos prestados o que han surgido con candidatos recurrentes en el odio político y uno de ellos denominado outsider, que destila y esparce la antipolítica, al que subyace una matriz de tinte seguritista-bukelista, debido a la incesante inseguridad y violencia que ha erosionado el principio constitucional del Buen Vivir del pueblo ecuatoriano. Cabe mencionar que no cesan las muertes violentas, profundización de la injusticia social, precarización de derechos fundamentales y humanos.
Empero, el régimen se ha concentrado en acelerar la monetización de los activos de sectores estratégicos petroleros y energéticos, en los pocos meses que le quedan. Lo que significa la vía para reprimir y violar los Derechos Humanos, amparados en el combate a la inseguridad y violencia que evidencian al Ecuador como uno de los más violentos de la región latinoamericana.
Para contextualizar el curso del proceso electoral, muy brevemente realizaremos una mirada retrospectiva a los siete binomios, ubicándolos ideológicamente.
Jan Tópic representa a la estructura neofascista mercenaria de ultraderecha amparada en combatir a la inseguridad y violencia auspiciado por el Partido Social Cristiano (PSC), de procedimientos fascistas, y el Mossad sionista; un mercenario o legionario que ha combatido en Siria, Ucrania, al servicio del neoliberalismo y fascismo.
En los años 80 exterminaron a la organización revolucionaria Alfaro Vive Carajo (AVC), integrada por jóvenes, contra ellos se perpetraron terribles violaciones a los Derechos Humanos, con juzgamientos extrajudiciales, tortura, desaparición forzada, con una fuerte represión. Desaparecieron a los hermanos Restrepo Arismendi. Cuando fui secretario del Frente Ecuatoriano de Derechos Humanos me cupo recibir un facsímil de más de 10 hojas de parte de su padre, Pedro Restrepo, exigiendo que el Gobierno de la Revolución Ciudadana conformara una Comisión de la Verdad por las atroces violaciones de Derechos Humanos, algunos casos están en proceso de judicialización, otros rayan en la impunidad. Esta organización política fue la mentora del nefasto presidente Lasso.
Fernando Villavicencio, representa a la derecha fascista quiteña, con un claro encuadre ideológico anticorreísta. Exasambleísta denunciado por actos de xenofobia y misoginia por exasambleístas mujeres. Al parecer, es una de las candidaturas construida en la Embajada norteamericana de Quito, auspiciado por el movimiento político Construye, en donde residen los vestigios de lo que fue Ruptura de los 25, de clara actuación en el régimen neofascista de Lenín Moreno, caracterizado por una desastrosa desinstitucionalización del Estado ecuatoriano, persecución política selectiva, destrucción de la integración latinoamericana, como es el caso específico de Unión de Naciones Suramericanas (Unasur). No hay que olvidar que Quito aún tiene la sede de este importante organismo de integración. Concomitante, un operador político de la OEAlmagro, del desaparecido y nefasto Grupo de Lima, responsables de la dictadura y golpe de Estado en contra del expresidente Evo Morales Ayma en el Estado Plurinacional de Bolivia, con la nefasta violación de Derechos Humanos de Senkata y Sacaba, ocurrida en noviembre de 2019.
En Ecuador, un octubre de 2019 salpicado de la terrible represión al levantamiento social y popular, con el cometimiento de delitos y crímenes de lesa humanidad que están en la impunidad y que mantienen en prisión durante dos años al exdefensor del pueblo por haber conformado una Comisión de la Verdad y Justicia que, mediante un sendo informe, determinó las presunciones de responsabilidad en contra de Moreno, María Paula Romo, exministra del Interior censurada por la Asamblea Nacional del Ecuador, una especie de dama de hierro que ordenó la fuerte represión al pueblo y que fue ejecutada a través de un excomandante General de la Policía, que en el régimen de Lasso condujo coincidentemente la represión de junio de 2022, que durante 18 días mantuvieron paralizado al Ecuador, con el consiguiente y nefasto resultado de varias víctimas mortales, personas heridas, juzgamientos extrajudiciales y la reutilización de la guerra judicial o lawfare, además de las noticias falsas que han propiciado la guerra judicial selectiva.
Moreno permitió la detención arbitraria de Julian Assange, fundador de WikiLeaks, en la Embajada ecuatoriana en Londres, y que el imperialismo británico esté a punto de extraditarlo a los Estados Unidos por haber denunciado el cometimiento de crímenes de guerra en Afganistán, Libia e Irak. Ello representa Fernando Villavicencio.
Daniel Noboa, el hijo de un magnate neoliberal de derecha oligárquica que fue acusado de cometer elusión y evasión tributaria, alejado de esa corriente neofascista, auspiciado por el movimiento político Pueblo, Igualdad y Democracia, de tinte neopopulista, pero presumimos que su único objetivo será cooptar asambleístas.
Yaku Pérez, en kichwa quiere decir «agua», el mestizo que se disfraza de indígena, su nombre es Carlos Pérez Guartambel, un político que dijo que era preferible en Ecuador un banquero y no una dictadura, refiriéndose a la Revolución Ciudadana, he allí el tenaz desastre y desenlace actual. Es importante mencionar que agitó el voto ideológico en un millón de votantes, que terminó convirtiendo en presidente a Lasso.
Es clave manifestar que también es una construcción de la Embajada norteamericana, una gran red del oenegenismo diverso, auspiciado por Usaid, la NED y todo un encuadre massmediático internacional, en donde se encubren en una aparente plataforma antipetrolera y antiminera, pachamamista, de defensa del agua, pero de total odio a la Revolución Ciudadana, auspiciado por Democracia Si, que en 2021 apoyó a un candidato de la neoderecha.
Durante la campaña electoral de 2021 tuvo el auspicio del movimiento Pachakutik, que hoy está fraccionado en dos tendencias, una de matriz derechizada y otra de tendencia orientada a la izquierda. Que permanece en litigio en el Tribunal Contencioso Electoral, organismo encargado de dirimir la disputa por la coordinación nacional del movimiento, en donde la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie) es la columna vertebral de los pueblos y nacionalidades del Ecuador con sus tres filiales: Ecuarunari (Sierra), Confederación de Nacionalidades Indígenas de la Amazonía Ecuatoriana (Confeniae) y Confederación de Nacionalidades Indígenas de la Costa Ecuatoriana (Conaice).
Otto Sonnenholzner, auspiciado por las organizaciones políticas Avanza-Suma. El líder de Avanza permanece prófugo en el Perú por el cometimiento de algunos delitos de corrupción cuando fue presidente del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social. Viene de la oligarquía guayaquileña del gran negocio de la importación, fue vicepresidente del nefasto Moreno y en plena pandemia del Covid-19 renunció al cargo. Muy carismático para una tribuna política, pero nefasto e ineficiente en la administración pública. No es un independiente.
Cabe recordar que durante su vicepresidencia a las víctimas letales del Covid-19 las recogían en féretros de cartón, porque morían en las calles y en las antesalas de los saturados hospitales públicos. Es de amplio conocimiento que tiene recursos económicos en paraísos fiscales, lo que está prohibido por el marco constitucional y legal ecuatoriano.
Xavier Hervas, exmilitante de Izquierda Democrática, que terminó en cuarto lugar en las elecciones de 2021, por su gran habilidad en las redes sociales para manejar a la juventud mediante el TIK-Tok, en patineta o vestido de viuda, que es una tradición de disfraces al culminar el año en el país.
Hoy tiene el auspicio del movimiento Reto, de un reciente gobernador de la provincia del Azuay, removido por el nefasto presidente neofascista Guillermo Lasso.
No tiene mucho que decir, porque el propio presidente Lasso lo denunció como evasor de impuestos, y actualmente está impugnada su candidatura. Es un empresario agroexportador de la sierra centro y del transporte pesado. A propósito, tampoco es un independiente, el movimiento que lo auspicia fue un gran colaborador en los regímenes de Moreno y Lasso, respectivamente.
Bolívar Armijos, del movimiento Amigo, viene de los Gobiernos Autónomos Descentralizados Rurales (GADS), ya que fue su presidente; muy cercano al neoderechista y considerado otrora alternativo Pedro Freire, protagonista de la antipolítica pero de clara tendencia e identidad política con la ultraderecha. Que, sin temor a equivocarnos, como expresa el refrán muy popular, será un saludo a la bandera.
Por lo tanto, desde el análisis de la arena política-electoral vemos que la organización política más sólida, con estructuras territoriales y representativas, es la Revolución Ciudadana, que tendrá que enfrentar los proyectiles y ataque de siete candidaturas que volverán a retomar el libreto del anti-correísmo, recurrirán al encuadre massmediático perverso para desacreditar al binomio que fue designado en la Convención de Portoviejo realizada el sábado 10 de junio.
Esta elección atípica del periodo presidencial que le falta por cumplir al neoliberal autoritario Guillermo Lasso, de un año y ocho meses, deberá trazar claramente un diagnóstico situacional de los principales problemas que azotan y aquejan al Ecuador y construir un programa de gobierno alternativo que se convierta en un amplio pacto ciudadano que permita la recuperación de la democracia, implementación de justicia social y políticas públicas tendientes a transformar y cambiar la inequidad e injusticia social, el empobrecimiento multidimensional, reactivación del empleo, inversión en las áreas sociales, salud, educación y fundamentalmente la honda preocupación del pueblo el combate a la inseguridad y violencia, es decir, invertir en seguridad sin caer en la decadente violación de los Derechos Humanos.
Por ahora, inscritos los ocho binomios presidenciales, tendrán que pasar por la etapa de calificación e impugnación respectivamente.
El único binomio calificado es el de Daniel Noboa Azin. Los otros siete deberán pasar por el proceso antes mencionado.
Esperamos que toda la parafernalia y persecución política descalificante en contra del binomio de a Revolución Ciudadana no active fallidos mecanismos de descalificación como ya lo tuvieron los impactos negativos y cargados de fake news durante la candidatura presidencial del actual candidato a vicepresidente por la Revolución Ciudadana Andrés Arauz.
Otro Ecuador es viable y posible para derrotar a todas las huestes de la partidocracia, organizaciones políticas de alquiler, así como a las derechas de tinte neofascista atrincheradas en el gran negocio de la importación, agroexportación. Los paraísos fiscales, la admiración por el bukelismo represor y los yanquis, que han construido candidaturas dispersas.
Ecuador en camino de la justicia social para derrotar al neoliberalismo autoritario y el neofascismo represor.
Condenamos y repudiamos el ataque violento y neofascista de la Policía Nacional con gases lacrimógenos al binomio y militancia de la Revolución Ciudadana, en el Consejo Nacional Electoral, el poder que debe garantizar la democracia participativa y electoral, acontecido el martes 13 de junio.
No es admisible que en una elección atípica presidencial y de 137 asambleístas ocurra ello.
Denunciamos ante la Comunidad Internacional a observar al régimen del presidente Guillermo Lasso , que el neoliberalismo autoritario está a pocos meses por salir del Palacio de Carondelet.
Alertamos que si ese es el procedimiento y actuación de Policía Nacional del Ecuador ya podemos presumir que va a ser una campaña electoral cuyo matiz será la violencia, represión y granadas de bombas lacrimógenas.
Por lo tanto, podemos manifestar que se construye democracia con una plena participación ciudadana y no mediante represión policial.
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Luis Ernesto Guerra Ecuatoriano, analista político y activista de Derechos Humanos
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