1994 es la fecha que se conformó la Cumbre de las Américas, encabezada por los Estados Unidos, cuando los poderosos tenían la certeza que el mundo era unipolar y neoliberal, es decir, que para ellos no existían los movimientos sociales, no eran relevantes las demandas de excluidas/os, ni sindicatos que interrumpieran la trasnochada fiesta del neoliberalismo que atravesaba al mundo. Por otra parte, tampoco existían el mundo virtual y telefónico que tenemos hoy, por lo tanto, el dominio era exclusivo de la prensa escrita y audiovisual (radio, televisión, cine) en ese contexto, nace aquella reunión convocada en Miami y presidida por el expresidente Bill Clinton.
La Primera Declaración decía: Por primera vez en la historia, las Américas son una comunidad de sociedades democráticas. Si bien nuestros países enfrentan diferentes desafíos en materia de desarrollo, están unidos en la búsqueda de la prosperidad a través de la apertura de mercados (…) decidimos iniciar de inmediato el establecimiento del “Área de Libre Comercio de las Américas” en la que se eliminarán progresivamente las barreras al comercio y la inversión…resolvemos concluir las negociaciones a más tardar en el año 2005, y convenimos en alcanzar avances concretos hacia el logro de este objetivo para el final de este siglo.
Dos objetivos que no se cumplieron, porque los pueblos se alzaron en contra de esta Cumbre, en la III, 2001, en Quebec y en la IV, 2005, en Mar del Plata, con grandes protestas antiglobalización y contra el Área de Libre Comercio de las Américas, ALCA, liderada por Hugo Chávez.
La IV Cumbre de las Américas con las grandes movilizaciones sociales, fue el punto de inflexión que dio paso al proyecto emancipador de la Patria Grande. Los presidentes Néstor Kirchner (Argentina), Hugo Chávez (Venezuela) y Luiz Inácio Lula da Silva (Brasil) se unieron para romper con la pretendida hegemonía norteamericana que creía recuperado su patio trasero. Las palabras célebres del comandante Chávez quedaron en el imaginario de los pueblos, ALCA, ALCA, ¡Al carajo!, y se dio el paso con ello al ALBA.
Han pasado 28 años de esa I cumbre que se creó para tomar el control de nuestra región a través del libre comercio (eufemismo); como diría el presidente mexicano López Obrador, eufemismos usados por los poderosos, no existe el libre comercio, no hay libertad sin igualdad de condiciones.
Estados Unidos será sede de la Novena Cumbre de las Américas en Los Ángeles, California, en junio de 2022, pero esta vez varios países se han restado a participar porque han excluido de esta “democrática Cumbre” a Venezuela, Cuba y Nicaragua. Los primeros en manifestarse fueron 14 países de la Comunidad del Caribe (Caricom) que anunciaron su decisión de no asistir a la Cumbre de las Américas, si continúa la exclusión de Cuba, Venezuela y Nicaragua.
Cabe destacar que Andrés Manuel López Obrador, AMLO, cambió las cosas alzó su voz para decir que no asistiría tomando distancia con valentía de los ejes USA/UE y mantener su postura antiunipolar, con un arrojo que resalta la dignidad y desplante del estadista mexicano que representa además al pueblo solidario de Zapata. AMLO rechazó tajantemente que cualquier país pueda excluir a otro, a su antojo, de un espacio que debería incluir sin distingos a la América toda.
El impulso de AMLO y Caricom le dio coraje a otros mandatarios de la región para rechazar la postura norteamericana, y hoy de los 34 países 22 no asistirán a la cita. Es decir México de la mano de AMLO retoma el liderazgo de la región, cuestión que no veía desde el presidente Chávez. Gran líder este profesor! celebro su serena bravura.
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Cris González Directora de Correo del Alba
