El presidente del Estado Plurinacional de Bolivia, Luis Arce Catacora, comenzó su discurso en la 76 Asamblea General de Naciones Unidas (ONU), destacando, pero también haciendo una crítica al papel que ha jugado este organismo concebido bajo el principio de igualdad jurídica de los Estados. Pero agregó que “le sumaría el principio de la igualdad política, para que el planeta no vuelva a pasar por confrontaciones armadas entre Estados que ponen en peligro la paz mundial que queremos todos”. “Estos fines no se han cumplido del todo, porque existen ambiciones por controlar el acceso a los recursos naturales y de dominar a pueblos, todavía nos muestran invasiones armadas directas, bloqueos criminales e intervenciones indirectas en lo militar, político, económico y mediático”
También recalcó que la pandemia ha demostrado la fragilidad de nuestras sociedades y Estados, generando impactos negativos sin precedentes en la salud, la economía, la educación, entre otros, que pone en riesgo las metas de la agenda 2030 en el plazo fijado.
Señaló que existe una crisis multidimensional del capitalismo, económica, social, ambiental, energética y desigualdad, se ha sumado la crisis sanitaria, al mismo tiempo que ha puesto en evidencia la continuación de la desigualdad entre los países del centro-periferia que eufemísticamente se denominan países desarrollados y en desarrollo.
Declaró igualmente que “Nos encontramos en un momento sin precedentes, donde la humanidad depende de las decisiones que se asuman. Es nuestro deber construir un mundo más justo, más democrático y solidario”.
En otro aspecto del discurso, el presidente Luis Arce, denunció el golpe de Estado de 2019 que dijo tuvo como protagonistas a opositores, cívicos, policías, militares, gobiernos extranjeros, la Organización de Estados Americanos (OEA) y la Unión Europea.
“La ruptura del orden constitucional en mi país tuvo la participación de actores nacionales: políticos que en las urnas no cuentan con el respaldo del pueblo, malos efectivos de la Policía y las Fuerzas Armadas, comités cívicos, la jerarquía católica y medios de comunicación hegemónicos. Pero también contó con la participación de la OEA, a través de su secretario general, Luis Almagro; de otros gobiernos, como el de Argentina, que enviaron armas y municiones a los golpistas, del representante de la Unión Europea y de otras organizaciones no gubernamentales de origen internacional”
Dio a conocer que Bolivia recobró su democracia, gracias a la unidad, lucha y conciencia del pueblo boliviano, ratificada en las urnas en octubre de 2021, desde entonces el país retomó las acciones para la estabilidad política, económica y social.
En referencia a la labor Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI – Bolivia) dijo que “El último informe presentado por un grupo internacional de expertos independientes identificó que en el Estado Plurinacional de Bolivia se cometieron graves violaciones de derechos humanos, masacres y ejecuciones sumarias. Nuestro compromiso con el pueblo boliviano es que se haga justicia por las 38 vidas perdidas, por los cientos de heridos, detenidos, por los perseguidos, asilados y exiliados; por las graves violaciones a los derechos humanos que se ejecutaron durante un gobierno de facto; porque la justicia es condición esencial de toda democracia y de construcción de una verdadera paz social”.
Denunció a la Asamblea el accionar del Gobierno de facto que vulneró constantemente el derecho a la presunción de inocencia, al debido proceso, la persecución, procesamiento y que el encarcelamiento de personas inocentes se convirtió en un hecho cotidiano y normal: “La humillación, represión, ultraje de nuestros símbolos patrios, como la wiphala, el uso racista y sexista de la fuerza, estuvo dirigido en contra de la población movilizada por sus derechos, en su mayoría indígenas, obreras y obreros, campesinas y campesinos”.
Declaró que existe el compromiso del Gobierno para construir de manera colectiva la paz social a partir de la recuperación de la memoria, verdad y justicia.
Asimismo, hizo referencia al compromiso y accionar de su gestión “Mi gobierno, democráticamente electo, a pesar de las múltiples dificultades, incluida la pandemia del Covid-19, hace el mayor de los esfuerzos para recuperar la estabilidad, y el crecimiento económico con justicia social. Con la confianza de más del 55% de los votos del pueblo boliviano, tenemos la responsabilidad de defender nuestra independencia y dignidad como Estado libre y soberano”. Otros de los temas dentro de su discurso pronunciado en la 76 Asamblea General de las Naciones Unidas, fue el derecho de Bolivia a una salida libre, soberana y útil al océano Pacífico. Con ese objetivo solicitó a Chile a una nueva etapa de diálogo y concertación para resolver el diferendo histórico. “El Estado Plurinacional de Bolivia reivindica en este foro mundial su derecho a obtener una salida libre, soberana y útil al océano Pacífico, mediante el diálogo y la concertación con la república de Chile, de acuerdo con lo determinado por la Corte Internacional de Justicia, en su fallo de 1 de octubre de 2018, que instó a que Chile y Bolivia sigan trabajando en aras de la solución significativa del problema”.
Discurso completo del presidente Luis Arce en la ONU 2021









