Para como comprender la significación histórica del movimiento insurreccional del 4 de febrero de 1992, es necesario sintetizar algunos hechos ocurridos entre 1982 y 1989: el 4 de octubre de 1982 en las cercanías de Cantaura, estado Anzoátegui, comandos militares y de la Dirección de los Servicios de Inteligencia y Prevención (Disip) asesinan a 23 jóvenes revolucionarios; el 17 de diciembre del mismo año nace, bajo la sombra del Samán de Guere, el Movimiento Revolucionario 200, liderado por el comandante Hugo Chávez Frías.;el 28 de febrero de 1983 el presidente Luis Herrera Campins decreta el control cambiario, pasando este día a la historia como «viernes negro»; el 8 de junio de 1984 el exministro de Transporte y Comunicaciones, Vinicio Carrera, es sometido a juicio por cargos de corrupción en el manejo de la Empresa Constructora Improvial; el 14 de marzo de 1987, manifestaciones estudiantiles en Mérida, a causa del asesinato del joven Luis Carvallo Cantor, estudiante de ingeniería de la Universidad de los Andes; 29 de octubre de 1988, 14 pescadores son asesinados en la región fronteriza de El Amparo, estado Apure, por comandos militares y Disip, bajo la falsa tesis de ser guerrilleros; el 21 de febrero de 1989, el gobierno de Carlos Andrés Pérez aumenta en 30% la tarifa del transporte público y el 27 y 28 de febrero, en distintas ciudades del país, las masas populares salen a protestar por las medidas económicas neoliberales fondo monetaristas del Gobierno, manifestaciones que dejarían un saldo de cientos de muertes y decenas de heridos.
El 3 de febrero de 1992, natalicio del Gran Mariscal de Ayacucho Antonio José de Sucre, en horas de la noche, se activa la Operación Ezequiel Zamora, que origina la insurrección militar del 4F/92, con la cual se abrió el camino hacia la Revolución bolivariana del siglo XXI.
La insurrección militar bolivariana del 4F, liderada por el hoy comandante eterno Hugo Rafael Chávez Frías, produjo una conmoción nacional que sacudió el soporte institucional militar del Pacto de Punto Fijo, del pacto imperial de Nueva York, de la democracia representativa de élite del bipartidismo adeco-copeyano. El 4F significó el desplome militar de esa democracia corporativa elitista que había quedado sin apoyo popular de masa; el 27F de 1989, otro golpe mortal al Pacto de Punto Fijo, en palabras del comandante Chávez.
La insurrección del 4F es el punto de conjunción histórica de la rebeldía popular del 27F de 1989 y la rebeldía militar patriótica bolivariana, que dará origen a la unidad cívico-militar del socialismo chavista del siglo XXI.
Ese día, 4F, emergió un líder para hacerse eterno en Venezuela, América Latina y el Mundo: Hugo Chávez Frías, quien en su intervención de apenas 72 segundo por TV, en su condición de preso, transmitió sentimiento amoroso de patria y dignidad, llamando a sus compañeros a deponer las armas. Un hombre que mostró ante las cámaras de TV su rostro cansado, pero altivo y digno, ordenando la rendición porque no se habían cumplido los objetivos en la capital: Caracas. Un hombre que mostró ese día en su rostro humano, su inmenso amor por la vida, con el criterio humanitario de evitar víctimas innecesarias, asumiendo la responsabilidad de los hechos en un país caracterizado por la irresponsabilidad y el no dar la cara, manera de actuar de la élite corporativa partidista de la Cuarta República.
El 4F/92, su líder Hugo Chávez Frías sembró una esperanza con su célebre «por ahora «, mostrando con su poder de convicción que el pacto oligárquico de Punto Fijo se había salvado solo por un momento.
El 4F/92, día de la dignidad, abrió el proceso de apertura de la refundación de la patria; significó un duro golpe a la partidocracia gobernante de Acción Democrática y Copei; sacudió al poder judicial y a todas las instituciones del poder público; puso a tambalear el Ejecutivo, el cual vivió en la inestabilidad durante los meses posteriores al 4F/92. Recordemos como hechos históricos, consecuencias de ese terremoto, sismo político, la demanda judicial introducida por el entonces Fiscal General de la República, Ramón Escobar Salom, contra el presidente Carlos Andrés Pérez y su posterior destitución en mayo de 1993.
El 4F/92 produjo un sentimiento unánime antigobierno, antiestatus, manifiesto en todas las actividades espontáneas de la población: cacerolazo del 10 de marzo de 1992; la insurgencia militar aérea del 27 de noviembre de 1992, empujada por la insurgencia previa del 4F.
Al cumplirse 29 años del 4F, podemos decir que el líder militar y político de ese movimiento insurreccional, comandante Hugo Chavez, al llegar al poder por vía electoral, pacífica, al ganar las elecciones en diciembre de 1998, inició un proceso de cambios y transformaciones revolucionarias que son hoy testimonio histórico de su lealtad a los postulados enarbolados ese día:
1) Refundó la República convocando la Asamblea Nacional Constituyente, la cual elabora la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela (1999), aprobada por el pueblo venezolano.
2) Da nacimiento a la Democracia Participativa y Protagónica, estimulando el protagonismo popular.
3) Promovió la Democracia Social de Justicia e Igualdad, garantizando los derechos sociales gratuitos y universales de las mayorías sociales oprimidas.
4) Renacionalizó el petróleo, rescata la faja petrolífera del Orinoco y recupera la OPEP y los precios del petróleo.
5) Bajo el ideal unionista bolivariano, construye mecanismos de unidad de los pueblos latinoamericanos: la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA), el Petrocaribe, la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac).
6) Devuelve a las Fuerzas Armadas su identidad con el pensamiento nacionalista, antiimperialista y unionista bolivariano.
7) Replanteó la reconstrucción del socialismo bajo los ideales de Bolívar, Simón Rodríguez y Zamora, conjugados con el humanismo cristiano y marxista.
8) Diseñó estrategias y políticas que derrotaron el proyecto neoliberal en Venezuela y América Latina.
Como canta Silvio Rodriguez: «Solo el amor engendra la maravilla. Solo el amor consigue encender lo muerto». Por esta obra de amor y lealtad con su pueblo, Chávez vive y la patria independiente y soberana, como nos lo planteó en el Primer Gran Objetivo Histórico del Programa de la Patria 2012, sigue viva hoy bajo el liderazgo del presidente Nicolás Maduro, resistiendo con la dignidad del 4F/92 la agresión imperial estadounidense y enfrentando a la derecha fascista de Juan Guaido, Leopoldo López y Julio Borges, tutelada por Washington. Seguimos teniendo hoy patria soberana, patria independiente, legado del movimiento insurreccional del 4F. Viviremos y venceremos.
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Miguel Tenía Docente
